¿Cuál es la mejor técnica para dar feedback?

La mejora continua es uno de los principios de la filosofía Agile. Será por eso que los equipos ágiles son quienes mejores lecciones de feedback nos pueden regalar.

Conversamos con Pilar Jular, entrenadora de Dirección de Empresas y consultora con más de 20 años de experiencia en el mundo corporativo y académico, acerca de esta conversación clave por todos sus beneficios: impulsa la mejora continua, crea confianza, genera libertad de expresión, fortalece las relaciones y contrarresta el miedo al error.

Entre las técnicas más conocidas, se encuentra la del sandwich. Propone que quien inicia esta conversación comience mencionando todo lo bueno, inserte aquello que hay que trabajar en forma de crítica constructiva al medio y cierre con comentarios positivos. Hay voces científicas en contra de esta manera de encarar la charla y también hay otras propuestas…

¿Cuál será la mejor? En opinión de Pilar, “cualquier técnica es simplemente una forma de organizar el discurso, teniendo en cuenta que no hay que improvisar sino planificar ese momento para realmente lograr el propósito“. El motivo es guía y clave; “nos sentamos a encarar esta charla para corregir un hábito que no está haciendo bien al equipo o a la empresa, para llevar la performance de un colaborador a otro nivel”.

Allí aparece esta otra persona con la que estamos hablando. En este sentido, “es importante que el líder conozca a su interlocutor lo suficiente como para poder tener llegada”.

Por otro lado, el contexto también es un factor importantísimo para diseñar este momento: “Hay que tener muy asimilado el ADN cultural de la industria. El tipo de liderazgo y la forma en la que normalmente se comunica en la organización van a marcar mucho el camino”, explica Pilar. “Por ejemplo, en un entorno muy masculinizado, donde generalmente el discurso es mucho más concreto, es difícil que una crítica directa se tome a mal; distinto a otro tipo de otras instituciones donde hay más sensibilidad”.

El liderazgo en contextos ágiles es un ejemplo, fuera del ámbito de los recursos humanos, del que se puede aprender un montón. La mejora continua es uno de los principios de la cultura Agile y ésta sólo es posible gracias al ida y vuelta. En el ciclo de vida de la entrega de proyectos de este tipo, hay bucles de feedback frecuentes. El trabajo se divide en pequeños entregables, lo que permite un continuo perfeccionamiento, para que el resultado encaje perfectamente con lo que necesita el cliente final.

Una de las misiones más importantes del Scrum Master es coachear al equipo en el arte de dar feedback, para lograr mejoras en las entregas y evitar la tensión que daña las relaciones. “Generalmente, estos líderes son personas que, sin especializarse en recursos humanos, tienen que hacer la gestión del capital humano, a veces con experiencia y otras sin”. Entonces, sus herramientas clave son su experiencia y su capacidad comunicativa. “Si hay un liderazgo transparente, quien recibe feedback no va a sorprenderse al momento de iniciar la conversación”.

Técnicas hay muchas, y en los encuentros Pilar practica algunas de ellas pero siempre aclarando: “la técnica ayuda a planificar, pero no tiene que estructurar la conversación. Es una ayuda para que llegado el momento, no se nos olvide nada que sea realmente importante”